Un pedacito de mi

Hoy me apetece mucho escribir. Es uno de esos dias donde siento que lo único que puede terminar de completarme son las letras. Pero hoy voy a escribir una carta. Una para mi futura pareja que pasará casi toda su vida a mi lado (suena tentador, eh). Hay tantas cosas que tengo que decirte, que ni siquiera se por donde quiero empezar. Ahora mismo no se como pintar tus ojos, ni tus labios, ni tu cabello y lo más importante, tu sonrisa. Ni siquiera se si eres hombre o mujer, pero se que independientemente de eso, mis sentimientos no cambiarán.

Toda mi vida me he estado preguntando quién será la persona. ¿La conozco? ¿He hablado con ella? ¿Es de otra ciudad? Y como esas preguntas, miles más se van acumulando en mi cabeza y para serte sincera, no las quiero olvidar. No las quiero tirar a la basura, son mi refugio por las noches, cuando no puedo dormir. Y si, en verdad, no se basan en nada. Pero cada vez que pienso en ti me siento protegida, porque se que en alguna parte del mundo habrá alguien que conseguirá hacerme feliz.

Se que terminarás de completarme. Somos dos mitades que cuando se junten harán que todo encaje y seremos uno. Estoy segura de que nadie me conocerá mejor que tu. Nadie me amará tanto como tu. Nadie conseguirá sacarme tantas sonrisas. Y risas, ya que estamos. Crearemos nuestra propia historia de amor y me aseguraré de que sea la más bonita de todo el vecindario. No tendré que fingir como soy (ha pasado algunas veces) porque tu me querrás por ser yo y no un personaje irreal. Pasaremos por momentos duros, momentos graciosos, momentos felices, momentos tristes… Pero tu estarás a mi lado y eso será la única medicina que necesitaré para curar todos nuestros males.

Algunos días te cansarás un poco de mi al igual que yo me cansaré de ti, pero siempre conseguiremos encontrarnos el uno a otro en medio de la oscuridad. Porque el amor siempre sobresaldrá mucho más que todo lo demás, eso te lo aseguro. Estaría bien vivir alguna historia de amor como la de Rose y Jack en Titanic (pero sin que alguno de los dos muera) o como la de Romeo y Julieta (pero sin el trágico final. La romántica historia de Elizabeth Bennet y Mr. Darcy me parece una buena opción también. Si, estaría bien si fuéramos protagonistas de un libro o película. Pero vivimos en la realidad, y en la realidad no hay ese tipo de historias.

Nos conoceremos estudiando, o en alguna cafetería, o de fiesta, o en la playa. Nuestro encuentro no será épico, digno de ser recordado. Nuestro primer beso tampoco será una maravilla, será más bien incómodo. Pero nuestras miradas intensas lo dirán todo y nuestras manos entrelazadas desearán estar atadas para quedarse así para siempre.

Me esforzaré por apartar de mi cabeza cualquier pensamiento doloroso, y pensaré únicamente en aquello que pueda hacerme feliz: tu amor.

Orgullo y prejuicio

Se que no te conozco (aún), pero se que nos amaremos con fuerza. Yo desde luego te daré todo el amor que me quede dentro de un solo corazón que algún día harás latir con fuerza. Yo te entregaré un pedacito de mi si tu me regalas tu amor.


Palabras Cosidas


Deja un comentario